En el auge de la industria de las nuevas energías, las terminales desempeñan un papel indispensable como componente clave de la conexión eléctrica. Desde la generación tradicional de energía eólica y la solar fotovoltaica hasta los emergentes vehículos eléctricos, los sistemas de almacenamiento de energía y otros campos, las terminales desempeñan discretamente su función única para garantizar la estabilidad y la seguridad de la transmisión de energía.
Con el continuo avance tecnológico y la expansión del mercado, la industria de las nuevas energías también exige un mayor rendimiento de los terminales. Esto exige que los terminales no solo tengan excelente conductividad eléctrica, resistencia a altas temperaturas y a la corrosión, entre otras características, sino que también sean más fiables y estables para adaptarse a la industria de las nuevas energías en entornos de trabajo complejos y cambiantes.